Arles vs Hideto [Frente de Batalla]
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Arles vs Hideto [Frente de Batalla]
1.- Será un torneo con un mínimo de 8 personajes, preferentemente no multicuentas.
2.- Cada batalla iniciará con un post del profesor ciprés, debe durar, como mucho tres días off rol, pedimos puntualidad :3
Las batallas son de tres post cada uno y se evaluarán al criterio del staff, poniendo críticas de porqué tal persona ganó o perdió, esto para demostrar nuestra neutralidad en el torneo.
3.- Si el plazo se vence, se tomará al user que mejor haya roleado como vencedor.
4.- Cada pelea ganada son 20 puntos del Frente, al obtener 90 se desbloquea la cueva del mejor aprendiz.
5.- Ya sé ¿como ganar 90 puntos cuando el torneo ofrece solo 60?
Bueno, capturar un pokémon o evolucionarlo otorgaran 5, eclosionar un huevo otorgará 2 puntos, una lucha libre contra un user fuera del torneo otorgará 10 puntos.
6.- Si Mew ya fue atrapado/no me gusta/no me interesa/obtuve no 90, sino 100 puntos ¿Qué hago?
Simple, podrás intercambiar esos puntos por la oportunidad de luchar contra otro pokémon legendario o pedir una Master Ball.
Inicia Arles
2.- Cada batalla iniciará con un post del profesor ciprés, debe durar, como mucho tres días off rol, pedimos puntualidad :3
Las batallas son de tres post cada uno y se evaluarán al criterio del staff, poniendo críticas de porqué tal persona ganó o perdió, esto para demostrar nuestra neutralidad en el torneo.
3.- Si el plazo se vence, se tomará al user que mejor haya roleado como vencedor.
4.- Cada pelea ganada son 20 puntos del Frente, al obtener 90 se desbloquea la cueva del mejor aprendiz.
5.- Ya sé ¿como ganar 90 puntos cuando el torneo ofrece solo 60?
Bueno, capturar un pokémon o evolucionarlo otorgaran 5, eclosionar un huevo otorgará 2 puntos, una lucha libre contra un user fuera del torneo otorgará 10 puntos.
6.- Si Mew ya fue atrapado/no me gusta/no me interesa/obtuve no 90, sino 100 puntos ¿Qué hago?
Simple, podrás intercambiar esos puntos por la oportunidad de luchar contra otro pokémon legendario o pedir una Master Ball.
Inicia Arles
Re: Arles vs Hideto [Frente de Batalla]
El Frente de batalla había comenzado, y como a Arles le tocó iniciar el combate, se le concedió la oportunidad de elegir el escenario donde la pelea tendría lugar. El joven decidió utilizar el templo de la primavera como campo de batalla; un conjunto de ruinas arquitectónicas rodeadas de flores que se encontraba a las afueras de Ciath. La gente desconocía por qué, incluso en la temporada de invierno, las flores seguían floreciendo hermosas y con colores vivos.
Dejó su motocicleta aparcada detrás de unos arbustos y se dirigió a una glorieta que se encontraba en medio de las ruinas. Sacó una poké ball de su bolsillo izquierdo, llamando a Florgess para que apareciera. El pokémon hada lucía feliz porque Arles iba a utilizarlo. No solía usar a Florgess en peleas debido a su extraña costumbre de volverse una arpía despiadada que se regocijaba con el sufrimiento de los pokémon. Había algo en las batallas que sacaba lo peor de su pokémon. Arles pensaba que Florgess había sido influenciada por alguna fuerza maligna en el árbol del origen, Yggdrasil, ya que antes de ir a ese lugar su pokémon era gentil y bondadoso las veinticuatro horas del día.
Florgess se serenó completamente cuando una brisa primaveral agitó los pétalos de su cuerpo. Arles miró su reloj. Su enemigo estaba demorando en llegar. Se quedó esperando en ese lugar mientras Florgess realizaba su “preparación”, la cual consistía en llenar la glorieta con flores de todos los tipos y colores, transformando el terreno en un jardín de fantasía; no por nada era conocida como la Diosa Fabulosa de las flores. Ni siquiera parecía que había suelo debajo de todo ese verdor.
-No seas tan efusiva Florgess, podrías matar a nuestro oponente de alergia con todo el polen que hay en el aire.- Le advirtió a su pokémon, el cual no entendió que se trataba de una broma.-Puedes continuar decorando, no me importa.- Se sentó en un bloque de piedra que antes fue una columna con las piernas cruzadas.
Dejó su motocicleta aparcada detrás de unos arbustos y se dirigió a una glorieta que se encontraba en medio de las ruinas. Sacó una poké ball de su bolsillo izquierdo, llamando a Florgess para que apareciera. El pokémon hada lucía feliz porque Arles iba a utilizarlo. No solía usar a Florgess en peleas debido a su extraña costumbre de volverse una arpía despiadada que se regocijaba con el sufrimiento de los pokémon. Había algo en las batallas que sacaba lo peor de su pokémon. Arles pensaba que Florgess había sido influenciada por alguna fuerza maligna en el árbol del origen, Yggdrasil, ya que antes de ir a ese lugar su pokémon era gentil y bondadoso las veinticuatro horas del día.
Florgess se serenó completamente cuando una brisa primaveral agitó los pétalos de su cuerpo. Arles miró su reloj. Su enemigo estaba demorando en llegar. Se quedó esperando en ese lugar mientras Florgess realizaba su “preparación”, la cual consistía en llenar la glorieta con flores de todos los tipos y colores, transformando el terreno en un jardín de fantasía; no por nada era conocida como la Diosa Fabulosa de las flores. Ni siquiera parecía que había suelo debajo de todo ese verdor.
-No seas tan efusiva Florgess, podrías matar a nuestro oponente de alergia con todo el polen que hay en el aire.- Le advirtió a su pokémon, el cual no entendió que se trataba de una broma.-Puedes continuar decorando, no me importa.- Se sentó en un bloque de piedra que antes fue una columna con las piernas cruzadas.
Arles Gevanni
Entrenador
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Fecha de inscripción : 30/11/2014
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Re: Arles vs Hideto [Frente de Batalla]
No tardó mucho para ubicar el lugar donde se daría a conocer el Frente Batalla por su primera ronda de lucha, Hideto ansiaba el día un tanto, eso se debía a que buenos objetos estarían en juego, si el lograba obtenerlos podría re-venderlos a precios mayores a quienes no tuvieran precisamente mucho conocimiento del tema. Los resultados del torneo habían sido anunciados, y Hideto ya había visto quien sería su oponente, un enigmático chico rubio sería su rival en la misma pelea.
El ladrón tuvo que pensarse bastante bien las cosas, pues no conocía en nada al rubio contra el que lucharía, por lo que tuvo que elegir cuidadosamente al pokémon que usaría en batalla.
-Muy bien, tu serás quien vaya.-
Dijo Hideto al momento de ver la pokéball de Gyarados, apreciandola a contra luz mientras se encontraba sentado en la cama del hotel donde se alojaba.
Al día siguiente apareció en el lugar de la batalla vestido a manera formal, traje negro, camisa blanca, zapatos limpios y una corbata del mismo color oscuro.
-¿Es usted Arles Gevanni?-
Preguntó el pelinegro cordialmente mientras dejaba libre al Gyarados que llevaba una cruz en su frente, pokémon que usaría para luchar esta primera ronda.
El ladrón tuvo que pensarse bastante bien las cosas, pues no conocía en nada al rubio contra el que lucharía, por lo que tuvo que elegir cuidadosamente al pokémon que usaría en batalla.
-Muy bien, tu serás quien vaya.-
Dijo Hideto al momento de ver la pokéball de Gyarados, apreciandola a contra luz mientras se encontraba sentado en la cama del hotel donde se alojaba.
Al día siguiente apareció en el lugar de la batalla vestido a manera formal, traje negro, camisa blanca, zapatos limpios y una corbata del mismo color oscuro.
-¿Es usted Arles Gevanni?-
Preguntó el pelinegro cordialmente mientras dejaba libre al Gyarados que llevaba una cruz en su frente, pokémon que usaría para luchar esta primera ronda.
Hideto Lucilfer
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Re: Arles vs Hideto [Frente de Batalla]
Miró sin mucha simpatía al hombre que acababa de llegar. La expresión de Arles no podía ser descrita como de desprecio, era más bien el más puro desinterés. Florgess saludó al hombre con amabilidad e hizo una delicada reverencia. A pesar de que la diferencia de tamaño entre ambos pokémon era abominable, Florgess no lucía preocupada en lo más mínimo. Incluso saludó al Gyarados, pese a que éste no se veía como un pokémon muy amistoso.
-Deberías conseguirte un reloj. Te he estado esperando durante un largo rato- Arles se colocó detrás de Florgess, guardando una distancia prudente de seis metros. No le gustaba estar muy cerca cuando la diosa de la primavera estaba suelta. Nunca se sabía si una flor dentada saldría del piso para arrancarle a uno la cabeza. El pokémon comenzó a tararear, como si estuviera cantando, moviéndose rítmicamente de un lado a otro sin despegarse del piso. Sólo se bamboleaba elegantemente de derecha a izquierda.
-¿Estás lista Florgess?- Preguntó al pokémon hada. Florgess respondió moviendo la cabeza de arriba abajo. –Muy bien- El rubio cruzó los brazos sobre su pecho y cerró los ojos.-Acaba a tus enemigos sin piedad, flor del mal- La ornamenta de flores de la pokémon comenzó a oscurecerse, como si sus pétalos se quemaran, tornándose de un color similar al carbón. Su mirada cambió totalmente: sus ojos centellaban con hostilidad. –Naturaleza indomable, viento con aroma a muerte- Recitó como un cántico mientras Florgess seguía mutando. La parte verde del cuerpo de Florgess se tiñó de negro con visos rojos. Los pétalos de las flores alrededor de la diosa también cambiaron, mostrando signos de envejecimiento-diosa que reinas sobre la vida y la muerte. Manifiéstate, Perséfone- Los ojos de Florgess se transformaron en dos orbes oscuros y malévolos. La naturaleza que había en el templo de la primavera se marchitó totalmente, incluso el cielo lucía más gris y apagado.
Arles abrió los ojos cuando terminó de “invocar” a la segunda personalidad de Florgess. Perséfone sería suficiente para acabar con Gyarados. Florgess observó a su rival con arrogancia y malicia, como si estuviera pensando en un destino terrible para él. Vides de rosas negras surgieron entorno a la diosa magnifica de la vida y la muerte, uniéndose para formar una rosa carmesí que era más grande que Florgess y que contaba con tres pares de látigos espinosos. –Terminemos con esto. Ataca con tu manifestación de la diosa demonio- El pokémon asintió con la cabeza, dirigiendo todos los látigos de espinas hacia Gyarados para generar un bloqueo.
La rosa seguían creciendo, formando ramificaciones de espinas bajo la tierra. Florgess estaba preparando el campo. Su ataque inicial era una simple distracción para emboscar a Gyarados. Las enredaderas de espinas treparon las columnas, rompieron las rocas y se extendieron incluso detrás de los entrenadores. La reina de las flores quería el dominio absoluto, y eso era algo que Arles sabía de antemano.
-Deberías conseguirte un reloj. Te he estado esperando durante un largo rato- Arles se colocó detrás de Florgess, guardando una distancia prudente de seis metros. No le gustaba estar muy cerca cuando la diosa de la primavera estaba suelta. Nunca se sabía si una flor dentada saldría del piso para arrancarle a uno la cabeza. El pokémon comenzó a tararear, como si estuviera cantando, moviéndose rítmicamente de un lado a otro sin despegarse del piso. Sólo se bamboleaba elegantemente de derecha a izquierda.
-¿Estás lista Florgess?- Preguntó al pokémon hada. Florgess respondió moviendo la cabeza de arriba abajo. –Muy bien- El rubio cruzó los brazos sobre su pecho y cerró los ojos.-Acaba a tus enemigos sin piedad, flor del mal- La ornamenta de flores de la pokémon comenzó a oscurecerse, como si sus pétalos se quemaran, tornándose de un color similar al carbón. Su mirada cambió totalmente: sus ojos centellaban con hostilidad. –Naturaleza indomable, viento con aroma a muerte- Recitó como un cántico mientras Florgess seguía mutando. La parte verde del cuerpo de Florgess se tiñó de negro con visos rojos. Los pétalos de las flores alrededor de la diosa también cambiaron, mostrando signos de envejecimiento-diosa que reinas sobre la vida y la muerte. Manifiéstate, Perséfone- Los ojos de Florgess se transformaron en dos orbes oscuros y malévolos. La naturaleza que había en el templo de la primavera se marchitó totalmente, incluso el cielo lucía más gris y apagado.
Arles abrió los ojos cuando terminó de “invocar” a la segunda personalidad de Florgess. Perséfone sería suficiente para acabar con Gyarados. Florgess observó a su rival con arrogancia y malicia, como si estuviera pensando en un destino terrible para él. Vides de rosas negras surgieron entorno a la diosa magnifica de la vida y la muerte, uniéndose para formar una rosa carmesí que era más grande que Florgess y que contaba con tres pares de látigos espinosos. –Terminemos con esto. Ataca con tu manifestación de la diosa demonio- El pokémon asintió con la cabeza, dirigiendo todos los látigos de espinas hacia Gyarados para generar un bloqueo.
La rosa seguían creciendo, formando ramificaciones de espinas bajo la tierra. Florgess estaba preparando el campo. Su ataque inicial era una simple distracción para emboscar a Gyarados. Las enredaderas de espinas treparon las columnas, rompieron las rocas y se extendieron incluso detrás de los entrenadores. La reina de las flores quería el dominio absoluto, y eso era algo que Arles sabía de antemano.
Arles Gevanni
Entrenador
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Fecha de inscripción : 30/11/2014
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Re: Arles vs Hideto [Frente de Batalla]
Hideto sonrió levemente ante el gesto de cortesía de parte del Florgess, que era al parecer todo lo contrario al joven con el que estaría por enfrentarse: Arles Gevanni, quien miraba con cierta arrogancia al pelinegro y su Gyarados.
-No recuerdo el hecho de que hubiera un tiempo de cita para llegar.-
Respondió Hideto con la más cínica sonrisa, quería hacer enfadar al jóven, sacarlo de sus casillas para luego aprovecharse de los huecos en su estrategia. O eso pensaba antes de ver al mismo Arles retroceder a una distancia significativa de su pokémon. ¿Tramaba algo magno?
Hideto hizo lo mismo con Gyarados, pues sabía que la reacción de Arles no era ni más ni menos que algo que le inquietaba sobre su pokémon, y no es para más, Hideto tenía un as bajo la manga que si bien es controlable, puede llegar a ser un tanto peligroso a su persona.
Lo que llegó a preocupar un tanto más al pelinegro sobre su rival era el hecho de que este parecía estar invocando algo, cruzó los brazos y comenzó a recitar, y pronto apareció una bizarra versión oscura y macabra del carismático Florgess. La situación se puso tensa como cuerda de guitarra y esto orillaba a Hideto a usar también una invocación.
La cruz que llevaba en su frente comenzó a brillar, y la misma se marcó en un Gyarados que perdía su color, se volvía una pálida seríente marina.
-Despierta de ese letargo sueño, rey de las marionetas.-
Dijo Hideto a su Gyarados que ahora era un inmóvil cuerpo flotante sin el iris ni la pupila en sus ojos, pálido como un hueso, expulsando un humo blanco de su boca que dio lugar a dos serpientes, una roja, y otra azul, posteriormente se proyectó su sombra como una última de ellas de color negro.
Para cuando dicho rito terminó, las plantas del Florgess corrupto inundaron la recámara y mas allá, pero Hideto sabía que hacer.
-Gyarados hielo, gira al rededor de Flogess rápidamente usando Agilidad, cuando estén lo suficientemente desechas esas plantas, Gyarados fuego, sacrifícate.-
Dijo Hideto: su estrategia era que el rango de plantas se disminuyera con el frío y que al debilitarse no pudieran hacer mucha resistencia contra la flecha de fuego que podía ser Gyarados rojo, si eso sucedía, Hideto aún tenía al otro Gyarados negro.
-No recuerdo el hecho de que hubiera un tiempo de cita para llegar.-
Respondió Hideto con la más cínica sonrisa, quería hacer enfadar al jóven, sacarlo de sus casillas para luego aprovecharse de los huecos en su estrategia. O eso pensaba antes de ver al mismo Arles retroceder a una distancia significativa de su pokémon. ¿Tramaba algo magno?
Hideto hizo lo mismo con Gyarados, pues sabía que la reacción de Arles no era ni más ni menos que algo que le inquietaba sobre su pokémon, y no es para más, Hideto tenía un as bajo la manga que si bien es controlable, puede llegar a ser un tanto peligroso a su persona.
Lo que llegó a preocupar un tanto más al pelinegro sobre su rival era el hecho de que este parecía estar invocando algo, cruzó los brazos y comenzó a recitar, y pronto apareció una bizarra versión oscura y macabra del carismático Florgess. La situación se puso tensa como cuerda de guitarra y esto orillaba a Hideto a usar también una invocación.
La cruz que llevaba en su frente comenzó a brillar, y la misma se marcó en un Gyarados que perdía su color, se volvía una pálida seríente marina.
-Despierta de ese letargo sueño, rey de las marionetas.-
Dijo Hideto a su Gyarados que ahora era un inmóvil cuerpo flotante sin el iris ni la pupila en sus ojos, pálido como un hueso, expulsando un humo blanco de su boca que dio lugar a dos serpientes, una roja, y otra azul, posteriormente se proyectó su sombra como una última de ellas de color negro.
Para cuando dicho rito terminó, las plantas del Florgess corrupto inundaron la recámara y mas allá, pero Hideto sabía que hacer.
-Gyarados hielo, gira al rededor de Flogess rápidamente usando Agilidad, cuando estén lo suficientemente desechas esas plantas, Gyarados fuego, sacrifícate.-
Dijo Hideto: su estrategia era que el rango de plantas se disminuyera con el frío y que al debilitarse no pudieran hacer mucha resistencia contra la flecha de fuego que podía ser Gyarados rojo, si eso sucedía, Hideto aún tenía al otro Gyarados negro.
Hideto Lucilfer
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Re: Arles vs Hideto [Frente de Batalla]
-Oh, ¿no podías pensar en algo más original?- Se mofó Arles, pensando que el pelinegro no era capaz de utilizar con ingenio a su bestia. Quizá su rival había cristalizado las flores en la capa exterior, pero no había tomado en cuenta dos factores importantes: en ese momento había muchas ramificaciones creciendo debajo del terreno, esperando el momento indicado para romper el suelo y atrapar al pokémon serpiente marina, y por otro lado estaba el detalle de los pétalos de las flores infernales de Florgess y sus verdaderas fuerzas destructivas.-Te felicito, encerraste en hielo a todas las flores de la superficie. ¿Pero que hay de las que están a varios metros bajo tierra en este preciso momento? - Arles sonrió e hizo un ademán con la mano, indicándole a Florgess que hiciera salir las flores que se encontraban sepultadas bajo el hielo, las cuales trituraron la tierra utilizando la capacidad abrasiva de sus pétalos.
Nuevas flores emergieron desde las grietas, invadiendo el campo y esparciéndose por encima de los cristales rotos como una enfermedad. El fuego del Gyarados rojo no parecía mermarlas, ya que los pétalos de Florgess eran lo suficientemente resistentes como para sobrevivir a los ataques de los pokémon tipo fuego.-La flor más hermosa es aquella que florece en la adversidad, nunca lo olvides- Dijo Arles, haciendo referencia a la habilidad especial de Florgess: sólo el magma ardiente podría incinerar las flores del infierno; su capacidad para existir en ambientes hostiles era única.
Pétalos negros flotaron alrededor de las copias de Gyarados.-Los voy a hacer pedazos- Arles cerró la mano, señalándole a Florgess que debía hacer girar los pétalos rápidamente, reduciendo el espacio, dejando al pokémon de agua con pocas opciones de movimiento al tiempo en el que aparecían más pétalos negros que sellaban los huecos, formando una esfera perfecta que pretendía contener al pokémon con apariencia de dragón.
-¿Qué piensas hacer? Si cometes un error...- Arles colocó su mano como si fuera una pistola a la altura de su sien izquierda y fingió disparar- Estás perdido.- El rubio estaba bastante confiado en sus métodos, pensando que su rival no podía hacer nada para sorprenderlo.
Nuevas flores emergieron desde las grietas, invadiendo el campo y esparciéndose por encima de los cristales rotos como una enfermedad. El fuego del Gyarados rojo no parecía mermarlas, ya que los pétalos de Florgess eran lo suficientemente resistentes como para sobrevivir a los ataques de los pokémon tipo fuego.-La flor más hermosa es aquella que florece en la adversidad, nunca lo olvides- Dijo Arles, haciendo referencia a la habilidad especial de Florgess: sólo el magma ardiente podría incinerar las flores del infierno; su capacidad para existir en ambientes hostiles era única.
Pétalos negros flotaron alrededor de las copias de Gyarados.-Los voy a hacer pedazos- Arles cerró la mano, señalándole a Florgess que debía hacer girar los pétalos rápidamente, reduciendo el espacio, dejando al pokémon de agua con pocas opciones de movimiento al tiempo en el que aparecían más pétalos negros que sellaban los huecos, formando una esfera perfecta que pretendía contener al pokémon con apariencia de dragón.
-¿Qué piensas hacer? Si cometes un error...- Arles colocó su mano como si fuera una pistola a la altura de su sien izquierda y fingió disparar- Estás perdido.- El rubio estaba bastante confiado en sus métodos, pensando que su rival no podía hacer nada para sorprenderlo.
Arles Gevanni
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Re: Arles vs Hideto [Frente de Batalla]
Podría decirse que, hasta cierto punto, quien llevaba la ventaja era Arles, mas sin embargo, Hideto aún tenía uno que otro truco guardado bajo la manga; podía hacer las cosas bien, podía hacer las cosas mal, o podía hacerlas como el suele hacerlas, traducido esto como: Puede aplicar una gran estrategia con movimientos secundarios, puede destrozar todo con un ataque gigantesco o bien, puede robar la técnica que su oponente ha empleado contra el. Como el ladrón que Hideto es.
Sacó una pequeña libreta, iba a recitar un conjuro que llamaría a su último movimiento, al parecer su enemigo se había enfocado en el Gyarados real, dejando de lado al Gyarados sombra, quien, ahora que todo el ataque se había dirigido hacia el verdadero, podía dar el ataque a contacto como se había planeado anteriormente:
-Paso uno, fijese a los lados discretamente, esperando a la apertura perfecta. Paso dos, ataque tan fieramente como pueda sus debilidades. Paso extra: si todo lo demás falla, robe su arma y mátelo con la misma.-
Dijo Hideto. Al finalizar dicho rito el Gyarados negro voló rápidamente a velocidades de vértigo hacia el extraño pokémon poseído, autodestruyéndose al estar lo suficientemente cerca de el, posterior a eso, el Gyarados real recuperó su forma normal y antes de cualquier otra cosa usó "Mimético", dicho movimiento le permitía copiar el que el oponente había ocupado. Al contrario que su oponente Arles, Hideto no usó ningún truquito de magia en especial que le diera poder sobre cualquier cosa, solo usó su conocimiento para crear una estrategia que, si bien había creado desde hacía tiempo y no empleaba demasiado debido a que todos cedían a su Master Of Puppets, le daba varios meses de ventaja en cuanto a inteligencia se refería.
-Si tus florecitas no pueden ser quemadas, ni congeladas, entonces puedo robarlas.-
Dijo Hideto intentando provocar al joven con gestos de arrogancia en su mirar, había creado una pequeña cúpula de las plantas que había creado el pokémon hada para la defensa de Gyarados, asimismo, para neutralizar las de el adversario con su propia fuerza de arrastre.
Sacó una pequeña libreta, iba a recitar un conjuro que llamaría a su último movimiento, al parecer su enemigo se había enfocado en el Gyarados real, dejando de lado al Gyarados sombra, quien, ahora que todo el ataque se había dirigido hacia el verdadero, podía dar el ataque a contacto como se había planeado anteriormente:
-Paso uno, fijese a los lados discretamente, esperando a la apertura perfecta. Paso dos, ataque tan fieramente como pueda sus debilidades. Paso extra: si todo lo demás falla, robe su arma y mátelo con la misma.-
Dijo Hideto. Al finalizar dicho rito el Gyarados negro voló rápidamente a velocidades de vértigo hacia el extraño pokémon poseído, autodestruyéndose al estar lo suficientemente cerca de el, posterior a eso, el Gyarados real recuperó su forma normal y antes de cualquier otra cosa usó "Mimético", dicho movimiento le permitía copiar el que el oponente había ocupado. Al contrario que su oponente Arles, Hideto no usó ningún truquito de magia en especial que le diera poder sobre cualquier cosa, solo usó su conocimiento para crear una estrategia que, si bien había creado desde hacía tiempo y no empleaba demasiado debido a que todos cedían a su Master Of Puppets, le daba varios meses de ventaja en cuanto a inteligencia se refería.
-Si tus florecitas no pueden ser quemadas, ni congeladas, entonces puedo robarlas.-
Dijo Hideto intentando provocar al joven con gestos de arrogancia en su mirar, había creado una pequeña cúpula de las plantas que había creado el pokémon hada para la defensa de Gyarados, asimismo, para neutralizar las de el adversario con su propia fuerza de arrastre.
Hideto Lucilfer
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Re: Arles vs Hideto [Frente de Batalla]
- Juicio de Roxy:
- Lo que me levanta una duda es usar mimético para los ataques personalizados. No rompe ninguna regla, pero on-rol es como medio barato, porque en los juegos ese ataque existe con el lado malo de que te quita un turno, pero roleado ....
Supongo que así sería. Pero igual, en los juegos es un mt que no te encuentras tirado en cualquier lado, y aquí on rol le podemos poner el ataque que queramos a los pokemon. Con eso cualquiera le pone mimético a todos sus pokemon y los ataques personalizados quedan virtualemtne anulados
Por un lado, sí; por otro, igual hay ataques personalizados que no son mucho de ningún tipo en especial, como el gyarados negro del master of puppets. Sé que te refieres a resistir un poder propio como algo más allá de resistir algo del mismo tipo, pero igual me sigue incomodando harto. Quizás podría haber cosas incopiables, o que al menos el copiar un ataque personalizado fuese algo tan potente que requiriera ser un ataque personalizado en sí. No lo digo como para anularle el post o quitarle puntos a hideto o lo que sea, pero lo digo como idea a futuro
Mi veredicto es el siguiente. Con respecto a arles, encontré que todo estaba muy bien oresentado, tanto la redacción, como el flujo del ataque, como la personalidad del entrenador y su pokemon. El ataque personalizado fue bien usado al darle un giro con lo de las raíces, supo adaptarse al ataque del rival. Lo de hacer que las flores del infierno fueran inmunes al fuego sólo por ser del infierno lo encontré medio op, más aún considerando que con esto arles no se dignó a recibir ningún golpe por parte del rival
Con hideto, dejando de lado la incomodidad que causó su uso de mimético, creo que no elaboró mucho en usarlo. Se confió mucho en que el ataque en sí fuese un plot twist, y no especificó casi nada en cómo lo usaría. On rol, en uentro que está cagado, si el mismo arles se demoró en poner en movimiento el ataque, guarados que estaba arrinconado al milímetro está muerto.
- Juicio de Eru Chitanda:
- la verdad eso me complicó un poco, pero si lo piensas, al copiar el ataque personalizado tal vez no sería tan efectivo en el sentido de atacar al pokémon, ya que este sería resistente contra su propio poder, como si le hicieras lanzallamas a un tipo fuego
no sé expresarme muy bien como para detallarlo todo, pero por mi parte pienso que la pelea estuvo bien, se vio como ambos tenían algo para contra atacar a lo que hiciera el otro, sin embargo en cuanto al desarrollo del combate y después de lo del mimético, que aunque fuera buena estrategia salir de un problema utilizando la fuerza del enemigo, no parece bien copiar un ataque único, creo que Arles llevó la ventaja esta vez
- Resultado:
El ganador es Arles Gevanni al haber tenido la menor cantidad de errores.
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